Pese a unos servicios mínimos excesivos, pese a las bajas laborales por la situación sanitaria, y pese a que no se nos ha permitido el disfrute de las vacaciones y los permisos pendientes más allá de este mes (como sí se ha autorizado a otros cuerpos), las letradas y los letrados de la Administración de Justicia hemos ejercido mayoritariamente nuestro derecho fundamental a la huelga en defensa de unas reivindicaciones legítimas, justas y ya históricas.

Después de haber demostrado una paciencia y una consideración infinitas durante más de una década, era el momento de que, al amparo de una norma presupuestaria que obligaba a ello, el Ministerio de Justicia, y su titular, Pilar Llop, hubieran adecuado el salario de los LAJ al considerable aumento de funciones y responsabilidades asumidas de manera incesante en virtud de las reformas procesales y organizativas. Lejos de ello, y tras un acuerdo con los sindicatos generalistas, se optó por mantener ese injusto desequilibrio.

Ello ha puesto en evidencia, una vez más, la grave anomalía que sufrimos al no contar con interlocutores válidos que defiendan nuestros derechos e intereses, por cuanto nuestras asociaciones profesionales tienen negada de facto la audiencia, y la participación en la determinación de nuestras propias condiciones de trabajo.

Queremos agradecer, muy sinceramente, las incontables adhesiones y apoyos a la medida de huelga recibidos desde todos los sectores de la Administración de Justicia (asociaciones de jueces, colegios de abogados y procuradores, funcionarios, profesionales, etc.), así como de otros cuerpos superiores del Estado. Compartimos con ellos la visión de que la calidad en la actividad prestacional también pasa por tener funcionarios motivados y justamente retribuidos.

Tendemos nuevamente la mano, como lo hicimos en la reunión del día 13, y como lo hemos hecho posteriormente en comunicaciones dirigidas a la Ministra y al Secretario de Estado, para buscar un acuerdo que resuelva esta situación que nadie desea, y para empezar a dar respuesta a lo que las letradas y letrados de la Administración de Justicia venimos reclamando desde hace tantos años.

La Ministra, Pilar Llop, tiene que tomar nota de lo acontecido en el día de ayer, que no es más que la clara manifestación del hartazgo y de las justas reclamaciones de un Cuerpo de servidores públicos lealmente comprometidos con la Administración de Justicia.

Ya es hora de que el compromiso sea recíproco.

Screenshot_20210924-155711_Word